Horario de atención Lunes a Viernes 10:00 a 19:00 hrs.
El etopósido está aceptado en el tratamiento de: Tumores testiculares de células germinales, carcinoma de células pequeñas del pulmón, enfermedad de Hodgkin, linfomas no Hodgkin, leucemia aguda linfocítica y no linfocítica (mielocítica), sarcoma de Ewing, sarcoma de Kaposi asociado al SIDA, carcinoma adrenocortical, carcinoma gástrico, hepatoblastoma, linfomas cutáneos de células T, mieloma múltiple, neuroblastoma, sarcomas de tejidos blandos, tumores primarios del cerebro, tumores trofoblásticos gestacionales, carcinoma de células no pequeñas del pulmón, carcinoma endometrial, retinoblastoma, timoma, tumor de Wilms, osteosarcoma, tumores ováricos de células germinales.
El uso de CRYOSID ® Solución inyectable está contraindicado en los siguientes casos: Hipersensibilidad al etopósido, embarazo y lactancia. Debe considerarse el factor riesgo-beneficio cuando existan los siguientes problemas médicos: Depresión de la médula ósea, varicela, existente o reciente, herpes zoster, deterioro de la función hepática y renal, infecciones. Debe tenerse precaución en pacientes que hayan recibido previamente quimioterapia o radioterapia.
CRYOSID® Solución inyectable debe diluirse antes de su uso y administrarse mediante infusión I.V. lenta durante un periodo de 30 a 60 minutos para prevenir hipotensión y broncospasmos. No debe ser administrado por infusión I.V. rápida o por cualquier otra vía. En caso de presentarse hipotensión, ésta puede ser tratada deteniendo la infusión, administrando líquidos y con otras medidas de soporte; posteriormente se continúa la infusión a una velocidad menor.
Es importante el monitoreo cercano por parte del médico. Se recomienda la revisión de la boca del paciente en busca de ulceraciones (antes de la administración de cada dosis); llevar a cabo determinaciones de hematócrito o hemoglobina; cuenta leucocítica total y si es apropiado, diferencial; cuenta plaquetaria (se recomienda realizar antes de iniciar la terapia y a intervalos periódicos durante la misma, la frecuencia varía de acuerdo con el estado clínico, dosis y la administración concurrente de otros agentes); albúmina sérica (las concentraciones bajas pueden estar asociadas con un incremento en el riesgo de la toxicidad relacionada con el etopósido).
Se deben evitar las inmunizaciones a menos que estén aprobadas por el médico.
En caso de que se presente depresión de la médula ósea, se debe evitar la exposición a personas con infecciones, especialmente durante los periodos en los que se presentan cuentas sanguíneas bajas.
Consultar al médico inmediatamente en caso de presentarse fiebre o escalofríos, tos o ronquera, dolor de espalda o de costado, micción dolorosa o dificultad para orinar, sangrado o contusiones inusuales, heces tardías y negras, sangre en orina o heces, puntos rojos bien delimitados en la piel.
Se debe tener precaución con el uso de cepillos dentales, hilo dental o palillos; consultar al médico antes de que se lleven a cabo trabajos dentales.
Se recomienda tener precaución para evitar cortadas accidentales con objetos punzocortantes, evitar deportes u otras situaciones donde pudieran ocurrir contusiones o heridas.
Se recomienda tomar precauciones especiales en pacientes que desarrollan trombocitopenia como resultado de la administración de etopósido, éstas pueden incluir: cuidado extremo al realizar procedimientos invasivos, inspección regular de los sitios de administración I.V., piel (incluyendo el área perirrectal) y superficies de membranas mucosas en busca de sangrado o contusiones; limitar la frecuencia de punciones venosas y evitar las inyecciones intramusculares; llevar a cabo pruebas de orina, emesis, heces y secreciones en busca de sangre oculta. Estos pacientes deben evitar la ingestión de alcohol y ácido acetilsalicílico debido al riesgo de sangrado gastrointestinal. Pueden requerirse transfusiones plaquetarias.
Los pacientes que desarrollan leucopenia deben ser monitoreados cuidadosamente en busca de signos de infección. Puede requerirse soporte con antibióticos. En pacientes neutropénicos que desarrollan fiebre, debe iniciarse una terapia empírica con antibióticos de amplio espectro, quedando pendientes de los resultados que se obtengan de cultivos bacteriales y las pruebas de diagnóstico adecuadas.
No se recomienda la administración de CRYOSID® Solución inyectable en neonatos, debido a que contiene alcohol bencílico. Se ha asociado al uso del etopósido un síndrome de toxicidad fatal que consiste en acidosis metabólica, depresión del SNC, problemas respiratorios, insuficiencia renal, hipotensión y posibles convulsiones y hemorragias intracraneales.
Debido a que CRYOSID® Solución inyectable presenta polisorbato 80 en su formulación, no se recomienda su administración en infantes prematuros. Su uso se ha asociado con un síndrome que consiste en daño hepático y renal, deterioro pulmonar, trombocitopenia y ascitis.
Se pueden presentar reacciones anafilactoides en niños que han recibido venoclisis de etopósido en concentraciones mayores a las recomendadas.
No se debe administrar etopósido a pacientes que presenten disfunción hepática severa, asimismo, no se debe administrar por vía intracavitoria. Se debe tener precaución para evitar la extravasación del medicamento, aunque el daño tisular es raro.